Lo reconozco, me gusta mucho cómo trabaja la familia Arzuaga Navarro, admiro a Ignacio y aplaudo a su equipo. Pero con Pago Florentino me tocaron la fibra sensible y este cañón de Pago Mota tiene lo que me faltaba en la carta de vinos, dame un minutillo:

Es un bombazo de vino, potente y estructurado este Chardonnay ha sido fermentado en barrica y con esos nueve meses de maduración tiene una carga tánica deliciosa, y un potencial de guarda increíble. Apuesto que nos vamos a rifar las verticales de Pago Mota.

Yo lo he fichado al primer sorbo, me va a dar mucho juego en el menú gastronómico y hay una demanda creciente de este tipo de vino blanco. Sabroso, potente y con una relación calidad-precio inigualable.

Pin It on Pinterest

Shares
Share This