Skin Contact, el Albariño de La Mancha.
Castilla La Mancha está adaptándose al mercado continuamente, a su paso pero siempre adelante. Claro que el volumen es el matiz más conocido, pero hay tanto y tan bueno que la actividad es frenética pero casi silenciosa. El caso que nos ocupa hoy es de lo que vengo hablando, esas joyas que han pasado desapercibidas pero siempre han estado ahí, en la vanguardia.
El proyecto se llama Península Vinicultores, está vinculado a Bodegas Fontana, una de las que más admiro y he trabajado hace muchos años, por ese carácter inconformista y su actitud tan dinámica. Así que cuando vi a Arturo Montalvo, comercial del grupo y amigo mío, sabía que había novedades, siempre trae buenas nuevas, es el caso de hoy:
Skin Contact 2018 es un vino blanco seco de Cuenca, en concreto está elaborado en Bodegas Fontana de Fuente de Pedro Naharro, es un varietal de Albariño ¿Eh? ¡Sí!, un Albariño Conquense, «mirusté». Además es del tipo de vino que ahora llaman orange wines o vinos naranjas, porque ha fermentado con las pieles y eso le aporta el máximo de extracción posible de aromas y de color al mosto, por maceración con los hollejos. Esto no es nada nuevo, se ha recuperado de la larga historia de la enología. No recuerdo bien la fuente pero este tipo de vinos tiene registros en tinajas de barro con miles de años. Hoy por hoy están casi siempre relacionados con vinos naturales y/o criados en depósitos de cerámica, tinaja, ánfora…
Para matizar, Skin Contact es un vino blanco joven y seco elaborado con uvas de la variedad Albariño, no tiene ni Denominación de Origen ni Indicación Geográfica Protegida, se comercializa como vino varietal, ha sido elaborado fermentando y macerando unos ciento ochenta días el mosto y las pieles de uva. Todo la elaboración en depósito de acero inoxidable, es un vino estabilizado por frío y no está clarificado, además tiene una pequeña adición de sulfuroso, por higiene. Sólo han elaborado 5.735 botellas.
A un servidor vuestro le ha encantado, me parece que tiene un centenar de posibilidades jugando con la temperatura y la copa, es un vino delicioso y muy redondo que está en un buen momento, no me voy a esperar si madura bien. Lo he propuesto en copa amplia de cristal fino, a cinco u ocho grados centígrados, seguro que será un bocado delicioso junto con el queso manchego tierno frito con mermelada de zanahoria, arroz del señoret o una perdiz estofada. Pero ya digo que es infinito por la complejidad deliciosa de este vino. Eso sí, siempre bien servido y en buena compañía.